Teatro Terry

teatro Tomás Terry
teatro Tomás Terry

En el terreno que actualmente ocupa el Teatro Tomás Terry hacia 1840 se alzaba el Teatro Isabel II, construido por iniciativa del Teniente Gobernador, Brigadier Carlos Tolrá.

Años más tarde quedaron a cargo de la construcción del teatro Francisco y Emilio Terry a la muerte de su padre en Francia. En la construcción se          invirtieron más de 100 mil pesos de la herencia de los Terry. Para la realización del proyecto hicieron un concurso en Paris en busca de la mejor  idea y ganó el proyecto del ingeniero militar Lino Sánchez Mármol, de Santiago de Cuba.

La primera piedra fue puesta el 29 de diciembre de 1889, ocasión en que se conmemoraba el Día de Santo Tomás y se inauguró oficialmente el 12 de febrero de 1890.

La actual construcción tiene 1892 metros cuadrados, 5 arcos de ingreso, 3 puertas, varias galería y el interior de madera.

Cuenta con 300 lunetas y 21 palcos, suficientes para albergar más de 1200 espectadores. El escenario tiene 24 por 17 metros. El cielo razo del centro está conformado por 23 figuras representativas de la aurora.

teatro Tomás Terry
teatro Tomás Terry

En las galerías existen dos bustos que representan la Comedia y la Tragedia, además de retratos de la Avellaneda y de Gaspar Villate y pinturas murales del pintor madrileño Camilo Selaya. Tres mascarones de mosaicos de cerámica, confeccionados por la casa Salviatti, de Venecia, representativos de la comedia, la tragedia y la música, adornan la parte superior de la fachada.

El total se invirtieron más de 170 mil pesos. Hacia 1963 se realizó una      reparación capital y se reinauguró en el 65.

Por su escenario han desfilado figuras de talla mundial como la cubana Alicia Alonso y otras destacadas figuras del arte universal como como el Ballet Nacional de Cuba, el Conjunto Folklórico de Oriente, Codanza y el Ballet Lizt Alfonso.

Actualmente este ateneo auspicia cada dos años en Premio Terry de Teatro y el Festival Nacional de Monólogos. Además sirve de plaza fuerte para diversos grupos locales de teatro, danza y artes escénicas en general.

Entre los lauros más merecidos de este gigante del arte se encuentra su distinción como Monumento Nacional, otorgada en 1978, y devenido además, en la más alta expresión de la cultura local al figurar entre los lugares situados en el casco histórico de la ciudad y por el que se le otorgara el título a Cienfuegos de Patrimonio Cultural de la Humanidad en el 2005.

fuente : cienfuegos patrimonio