Carnavales en Cienfuegos

Nos cuentan los historiadores Díaz de Villegas y Rousseau en su “Memoria Descriptiva, Histórica y Biográfica de Cienfuegos” en lo relacionado a los carnavales en Cienfuegos, que el 17 de julio de 1909 en el Ayuntamiento, un jurado integrado por cuatro damas de la sociedad Cienfueguera de la época, eligieron a la Srta. Hortensia Cabrera como Reina del Carnaval que se celebraría en ese propio mes y que de hecho, se convirtió en la primera joven de nuestra ciudad que recibiera tal honor.

Es así que los días 23, 24, 25 y 26 de julio de aquel 1909, se celebran las grandes fiestas del carnaval que se iniciaron con una recepción oficial en el Casino Español en honor a la Reina y sus damas, luego una cabalgata hasta la Quinta Tillet la que estuvo situada donde hoy está la Escuela de Arte Benny Moré, una verbena en esa propia Quinta y más tarde bailes en los salones del propio Casino Español, el Liceo en ese entonces frente al Parque Martí, el Centro de Dependientes y en Minerva.

En los días siguientes se sucedieron bailes en esos mismos salones además de la que se dio en llamar “Batalla” de flores, serpentinas y confetis. Hubo disparos de salvas de cañón y bailes al aire libre en la Quinta Tillet con la Banda de Música y otras orquestas de la ciudad.

Sistematicidad de los Carnavales en Cienfuegos

A partir de la celebración del carnaval de 1909, estos festejos comenzaron a realizarse en la ciudad de manera sistemática.

Su comienzo en aquellos años se hacía coincidir con los días previos al “Miércoles de Cenizas” y continuaban por cuatro fines de semana los sábados y domingos, generalmente entre las 6 de la tarde y las 6 de la mañana.

Esos festejos se distinguieron fundamentalmente por los bailes en las diferentes sociedades de la ciudad a la que asistían sus miembros e invitados, y los desfiles de carrozas y comparsas, sin olvidar la elección de la Reina y sus Damas lo cual se hacía previo a la inauguración de los festejos.

El colorido de los desfiles del Carnaval lo completaba el uso de serpentinas y confetis los que se lanzaban a las carrozas y comparsas tanto desde los balcones de las viviendas en las que además de sus moradores también se encontraban familiares y amigos, como desde las calles en las vías de la ciudad utilizadas para la exhibición y que era donde se concentraba la mayor parte de la población.

(Con la colaboración del Sr. Darío Méndez)

Financiación de los carnavales en Cienfuegos

Los carnavales desde sus comienzos fueron financiados por las casas y firmas comerciales a través del Ayuntamiento. Ese financiamiento también se reflejaba en el patrocinio de las carrozas, lo que no excluye su existencia representando a otras colectividades como ocurrió en los festejos de 1949 con la de la Sociedad China.

En días de carnaval todas las cafeterías, restaurantes y bares quedaban abiertos hasta el amanecer. También lo hacían aquellos comercios que vendían artículos propios del carnaval tales como serpentinas, confetis y disfraces entre otros.

El circuito del paseo de carrozas era un amplio recorrido por la ciudad que incluía a la calle de San Fernando, el Paseo del Prado, la calle de San Carlos y el Parque Martí pasando frente al Ayuntamiento que era donde se encontraba el jurado compuesto por personas notables en el quehacer cultural y periodístico de la ciudad y que determinarían la carroza y comparsa ganadores.

En la propia calle de San Fernando entre las de San Luis y Sta. Isabel se montaban palcos para la venta al público.

Otro componente de los festejos carnavalescos

Otro componente muy importante de los festejos carnavalescos además de la elección de la Reina, sus Damas y las carrozas, lo eran las comparsas que, patrocinadas en su vestuario por diversas casas comerciales, comenzaban sus ensayos semanas antes de iniciarse las fiestas en los barrios donde se asentaban.

Entre ellas estaban “Los Moros Azules” de la calle de Sta. Clara entre las de Casales y Velazco y “Los Príncipes de La Caridad” del barrio de San Lázaro.

Pero no eran las únicas en Cienfuegos donde también estaban “Los Chucheros”, “Los Turcos” y “Los Sultanes”, además de las que asistían procedentes de otras regiones del país invitadas expresamente a participar incluyendo a “Los Alacranes” de la Capital del país.

Las comparsas partían desde sus lugares de ensayo recorriendo varias calles de la ciudad hasta insertarse en el circuito en el que se realizaba el desfile oficial frente al Ayuntamiento donde se encontraba situado el Jurado, lugar este en que cada una de las agrupaciones ejecutaba la coreografía prevista tratando de obtener uno de los premios en disputa.

Lo característico de las comparsas a diferencia de los otros componentes, era la participación popular bailando (“arrollando”) al final de cada agrupación lo que se hacía durante todo el recorrido.

(Con la colaboración de Juan Bosco)

Cambios en la realización de los carnavales

A partir de los años 60 del pasado siglo comienzan a cambiar las concepciones para la realización de los carnavales, volcándose de manera rápida a las calles, surgiendo los kioscos para la venta de bebidas y comidas y los escenarios públicos para la realización de bailables populares. También se modificó la denominación de “Reina y sus Damas” por la de “Estrella y sus Luceros” cuya elección se hacía en una tribuna de madera construida al efecto frente al Palacio de Gobierno, antiguo Ayuntamiento y que dejó de realizarse en la primera mitad de los años 70.

El área de carnaval tuvo muchas modificaciones en el tiempo y en ello se emplearon varias zonas de la ciudad y dentro de ellas la del Paseo del Prado desde la calle de Sta. Cruz hasta la de Camposmane primero y luego hasta el final del malecón, el Parque Martí y la calle de San Fernando hasta el Paseo del Prado y la de Calzada de Dolores desde el Parque Villuendas hasta la calle de Delicias (59) siendo en esta última área donde se realizaba el paseo de las carrozas y el desfile de comparsas y muñecones, contando con palcos para el público en las cuadras más próximas al parque, algo que anteriormente se realizaba frente al Ayuntamiento.

Como un elemento curioso debe recordarse aún por algunos las acrobacias que realizaban los integrantes de la motorizada de la policía sobre sus motos y que brindaban un buen espectáculo.

(Con la colaboración de Juan Bosco)

Cambio en la fecha de los carnavales en Cienfuegos

Como siempre ocurría, los Carnavales en Cienfuegos se celebrarían en el mes de abril, próximos al aniversario de la ciudad y ese año de 1961 no debía ser la excepción y que, además, estarían dedicados a la Campaña de Alfabetización.

Nos cuenta el periodista Omar George que transcurrían los preparativos y el cumplimiento de la primera parte del programa de los festejos en que ya se había elegido a la Srta. Belén Valladares Pérez como la Reina además de sus damas de honor. También habían llegado a Cienfuegos las primeras carrozas invitadas a participar en las fiestas. Por otra parte, muchos vecinos de la ciudad estaban listos para recibir en sus casas a familias campesinas invitadas a las fiestas. Tampoco se había olvidado la selección del “Rey de los Feos” además de haberse realizado una convocatoria para premiar a las calles y vidrieras mejores adornadas.

Todo ello formaba parte del programa de las fiestas cuyo cumplimiento se vio interrumpido por la invasión que ocurriera por esos días en Playa Girón y que trajeron el luto a muchas familias.

Pero su celebración se concretó dos meses después, a finales del mes de junio hasta los primeros días de julio.

(George Carpí, Omar/ Girón: Los Carnavales pospuestos/ 18 de abril de 2022/ 5 Septiembre.cu». Fotos del citado trabajo)

 

*Autor del artículo: Cienfuegos y su Historia, publicado en su página de Facebook y reproducido en este sitio con su autorización.

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